Un día decidimos comprar piscina intex. Nuestra familia había crecido y needed un lugar para refrescarnos en las calurosas tardes de verano.
La piscina inflable intex parecía la opción perfecta. Ocupaba poco espacio, era fácil de inflar y desinflar, y el costo era bastante accesible.
Comenzamos a investigar los modelos disponibles. ¿Qué tamaño necesitábamos? No éramos muchos, así que una piscina de 10 pies por 30 pulgadas sería suficiente. ¿Cómo de gruesa debía ser la pared? Optamos por una piscina de pared delgada para ahorrar peso. ¿Cuántos galones podría contener? Aunque fuera pequeña, necesitábamos suficiente para nadar y zambullirnos.
finalmente, escogimos una piscina intex de 16.5 pies de diámetro y 42 pulgadas de alto. ¿Sería resistente? La piscina intex tenía una base reforzada y paredes gruesas de PVC duradero, así que confiamos en que duraría varias temporadas.
El día que llegó la piscina no pudimos esperar para ensamblarla. ¿Sería difícil de inflar? Inflar la piscina fue bastante sencillo siguiendo las instrucciones. Nuestros esfuerzos valieron la pena cuando la vimos completamente inflada, lista para ser llenada de agua y disfrutada.
¿Quedamos satisfechos con nuestra decisión? Hasta ahora, sí. La piscina intex ha soportado todas las pruebas y ha superado nuestras expectativas. Ha brindado muchas horas de diversión a nuestra familia en las cálidas tardes de verano. ¿Seguiremos disfrutando de ella durante años más? Eso solo el tiempo lo dirá.
