La idea de comprar corta césped lo había estado rondando desde hacía tiempo. Su propio césped se estaba convirtiendo en un jungla y el cortarlo manualmente cada fin de semana se le estaba haciendo agotador.
Necesitaba una solución más permanente y eficaz. ¿Sería demasiado?, se preguntaba. ¿No acabaría siendo una compra innecesaria que solo utilizaría ocasionalmente? Pero las imágenes de un césped corto, verde y pulcro no dejaban de perseguirlo.
Finalmente, no pudo resistirse más y entró en la tienda de jardinería. Había de todos los tipos; manuales, eléctricas, de gasolina, robot. ¿Cuál sería la más confiable y duradera? ¿Y la más fácil de utilizar? Sacudió la cabeza, comprar corta césped se había convertido casi en una obsesión.
Después de probar varios modelos, se decidió por una eléctrica. Potente pero manejable, y más ecológica que las de gasolina. Su precio tampoco era excesivo, podría amortizarla con el tiempo.
Salió de la tienda con la cortadora de césped en la parte trasera del coche, renovado y lleno de energía. ¡Por fin podría ponerle el ceased al desorden de su césped! Su césped nunca había estado tan verde y pulcro. ¿Sería demasiado pronto para comprar corta césped de nuevo?
¿O debería esperar un tiempo antes de volverse a plantear comprar corta césped ?
