Durante estas fechas, las hortensias han finalizado su período vegetativo y entran en letargo invernal, por lo que podarlas en este momento minimizará la pérdida de savia y follaje.
Podar las hortensias en otoño asegurará un rebrote vigoroso la próxima primavera.
Una vez los brotes se hayan secado, podremos eliminarlos por completo, reduciendo la planta a unos 30-40 centímetros de altura.
Esta poda drástica favorecerá la ramificación y la aparición de nuevos tallos, a la vez que eliminaremos posibles obstáculos para el paso del aire.
Una poda realizada en otoño conseguirá hortensias más compactas, equilibradas y florecientes.
La poda de hortensias no solo se limita a reducir su tamaño, también podemos darle forma a la planta. Si deseamos hortensias en balcón, podaremos la planta formando un arco o esfera. Para jardín, optaremos por formas más naturales que sigan las líneas de la planta. Al podar, eliminaremos también brotes, ramas flojas, *dañadas o enfermas*.
Una correcta poda de hortensias en otoño reportará múltiples beneficios: plantas más compactas y manejables, mayor producción de flores, mejora de la ramificación, posibilidad de formar arbustos en miniatura o altos arbustos. El cuidado en la poda hará que nuestras hortensias luzcan esplendorosas la próxima primavera.
¿Estás listo para que tus hortensias florezcan a raudales?
¡Adquiérelas ahora! Consulta nuestro catálogo online y descubre las novedades en hortensias de este otoño. ¡Tu jardín lo agradecerá!


